¿Viste cómo en verano las heladerías están a full con gente haciendo cola para un cucurucho? Bueno, nuestra “temporada alta” en Spare Rooms Buenos Aires es más o menos así. Febrero y julio son los meses en los que todo explota: estudiantes de todas partes del mundo y del interior empiezan a buscar habitaciones antes de que arranquen las clases.
Si tenés una habitación libre en tu casa y estás pensando qué hacer con ella, este viernes 22 de noviembre a las 18.30hs tenemos charla! Podes inscribirte al final del email
Soy Vale Pasmanter, fundadora de Spare Rooms Buenos Aires. Conectamos estudiantes en búsqueda de una habitación segura y chequeada en Buenos Aires con personas que tienen esos espacios disponibles en sus casas.
Si alguna vez tuviste una habitación libre en casa, seguro la miraste y pensaste: "¿Esto es un cuarto o un depósito donde el tiempo se detuvo?". Desde 2009, en Spare Rooms Buenos Aires, nos dedicamos a encontrarles un mejor destino a esos espacios: convertirlos en el lugar ideal para estudiantes que llegan a la ciudad con una valija llena de sueños y, por supuesto, ropa para las cuatro estaciones porque todavía no entienden que en Buenos Aires podés tener verano y otoño en el mismo día.
Como todo en la vida (y en las heladerías), ser anfitrión tiene sus ciclos. En febrero y julio, las habitaciones se ocupan más rápido que un cucurucho de dulce de leche granizado en enero. Desde ahora empezamos a recibir consultas de estudiantes que ya están planeando su llegada para febrero. Ellos quieren mudarse con tiempo, instalarse, y, de paso, entrenarse en el arte de pedir helado de dulce de leche granizado.
Eso sí, te aviso: febrero es una locura. La ciudad se llena de estudiantes internacionales que aterrizan antes de que empiecen las clases en marzo. Tienen que aclimatarse al ritmo porteño, hacerse amigos del kiosquero de la esquina y, claro, aprender cosas básicas como que en el subte podés transpirar y tener frío en un mismo trayecto, siempre con olor a medialunas de fondo.
En cambio, diciembre es un poco más tranquilo. Los estudiantes terminan el año académico, hacen las valijas y vuelven a casa para las fiestas. Es normal que las habitaciones queden vacías un tiempito. Pero ojo, siempre hay casos especiales: estudiantes que se quedan para descubrir el verano porteño (y sus 40 grados a la sombra) o que empiezan programas en fechas no tradicionales, como enero o febrero.
Ser anfitrión no solo es alquilar un cuarto, es abrir las puertas de tu casa a experiencias únicas. Eso sí, preparate para responder preguntas que van desde lo básico hasta lo inesperado: "¿Dónde compro la SUBE?", "¿Por qué el cajero me dio caramelos en vez de monedas?", o la infaltable "¿Es normal que el colectivo no pare si no le hago señas como un árbitro pidiendo el VAR?".
Lo que sí te puedo asegurar es que no te vas a arrepentir. Nosotros nos ocupamos de que todo sea seguro, fácil y sin sorpresas desagradables. Porque, a diferencia de una heladería en julio, acá siempre hay movimiento.
Gracias por leer ;)
Vale
Este viernes 22 de noviembre a las 18.30hs tenemos charla para nuevos anfitriones.
Quien tenga ganas de alquilar una habitación en su casa y quiera saber como es esta modalidad, lo invito a inscribirse. Solo son 30 minutos.
comparto estas ideas y las pongo en práctica hace años. Es un placer establecer buenas relaciones y compartir momentos. GRacias